Por considerarlo una obligación moral y tras rendir protesta como jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, anunció desde la sede del Congreso capitalino la desaparición de la Policía Antimotines.
“Coincidimos y lo hacemos por convicción, en lo que ha manifestado en diversas ocasiones nuestro Presidente de nunca utilizar a las Fuerzas Armadas para reprimir al pueblo, por ello y en cumplimiento de una de las demandas del movimiento estudiantil de 1968, he pedido al Secretario de Seguridad Pública la desaparición definitiva del cuerpo de granaderos”.
También anunció una inversión de cinco mil millones de pesos en el Metro, la adquisición de 100 trolebuses eléctricos y la construcción del Cablebús en Cuautepec.
Dijo que las estancias infantiles serán gratuitas y que otorgará apoyos directos, para que los damnificados por los sismos no sean deudores de la banca.